Aunque en Occidente es un gran desconocido, el comercio de jade se sitúa, según datos de la Confederación Internacional de Joyería (CIBJO), solamente detrás del diamante, moviendo una cantidad estimada en torno a los 32.000 millones de dólares al año básicamente en el mercado asiático.
Y aunque todos imaginamos una pieza de color verde cuando nos referimos a esta gema, el jade tiene muchos más colores, calidades, e incluso nombres. En Asia se le conoce comercialmente como Fei Cui. Ese es el objetivo de la Comisión de Gemología de CIBJO para este año: Intentar poner ‘orden’ y hacer homologable a nivel internacional su composición, la metodología de análisis y el nombre comercial.
“Sólo adoptando un nombre comercial unificado, el comercio y los consumidores podrán beneficiarse de ello. Por eso adelantamos que el nombre Fei Cui será reconocido y aceptado a nivel mundial” aseguraba en el último congreso de CIBJO Wong Kent, director gerente del gigante comercial Fook Tai Chow y presidente de la Asociación de Joyeros y Laboratorios de Kong Hong, desde donde se está impulsando esta iniciativa.
Este grupo explica que el Fei Cui es un agregado policristalino compuesto solo, o principalmente, por minerales Jadeíta, Ompacita y Kosmochlor, o una combinación de los tres. Y lo que buscan es que tanto la terminología que ellos han adoptado, así como los métodos de análisis se acepten a nivel internacional, no sólo en Hong Kong sino en China y el resto del mundo para que sea homologable en cualquier país en el que se comercie.
Más allá del jade: otras variedades comerciales
La Comisión de Gemología de CIBJO se reunirá el próximo 3 de noviembre para iniciar las discusiones sobre el borrador de trabajo que se ha presentado.
El debate no sólo incluirá el jade sino que se seguirá intentando definir los límites para gemas más conocidas pero que aún siguen teniendo confusión a nivel comercial, como las diferencias entre zafiros padparadscha, rosa o naranja, y entre los llamados zafiros fancy; o las diferencias también entre rubíes y zafiros rosas, así como entre aguamarinas, berilos verdes y esmeraldas.
Según anuncia CIBJO de esta reunión debería salir un documento que se incorporará a su Libro Azul de Gemología con las variedades, terminologías técnicas y nombres comerciales que ‘deben’ asociarse a cada una de estas gemas.