Amplio y revelador estudio el presentado ayer por la Fundación Montemadrid sobre la valoración de los españoles por la joyería, donde se puso de manifiesto no solamente el valor sentimental de las joyas, sino su consideración como inversión por parte de los clientes. En la presentación del informe estuvieron presentes el director general de la Fundación, José Guirao, y el director de los Montes de Piedad Montemadrid, Santiago Gil de la Rosa.
Uno de los aspectos destacables es la importante presencia de joyas y oro en los hogares españoles, que alcanza un 90% sin que existan diferencias significativas entre comunidades autónomas, si bien Castilla y León y Galicia son las que cuentan con hogares con mayor presencia de joyas y Andalucía y Cataluña las que menos.
Tipología de las piezas
Las joyas de oro más habituales son las sortijas (82%), los pendientes (74%), las pulseras (65%), los collares (55%) y los relojes (31%). Si hablamos de materiales, la pieza más popular es la sortija o anillo de oro (82%), la de plata la pulsera (52%), la de perlas es el collar (23%) y el diamante engastado en una sortija (17%).
En cuanto a las formas de adquisición, un 20% de quienes tienen joyas ha adquirido alguna en el último año, un 39% hace de 2 a 4 años, 43% de 5 a 9, 40% de 10 a 20, 18% de 20 a 30 y un 10% más de 30. Por otro lado, el 69% ha recibido alguna joya mediante regalo, el 64% la ha comprado en tienda física, el 11% en Internet y el 4% en subasta.
José Guirao: “Hay que empezar a cambiar la mentalidad para que la sociedad española considere la joya como una inversión muy rentable»
Entre quienes las han comprado, en un 87% de los casos no han requerido financiación para adquirirlas. Asimismo las herencias se muestran como otra fuente importante de transmisión ya que el 50% de los hogares las ha recibido en herencia.
Otro dato destacable es que sólo un 37% conoce el valor de sus joyas y un 21% de los encuestados ve en ellas una forma de inversión. En este sentido, 18% de los hogares ha solicitado un crédito o préstamo dejando como garantía una joya y un 57% muestra disposición a solicitar un préstamo o crédito dejando alguna de sus joyas en garantía en caso de necesitar liquidez.
Crédito prendario
El nivel de conocimiento de este tipo de créditos por comunidades autónomas varía entre el 76% de la Comunidad de Madrid y el 60% de Castilla La Mancha, según los resultados del estudio. En este sentido, los Montes de Piedad son las entidades mejor consideradas para solicitarlos, con un 39% de respuestas.
Santiago Gil: «Vamos a trabajar para posicionarnos como una alternativa financiera»
Valencia, Canarias y Andalucía son las comunidades en las que más se recurre a la financiación con garantía de joyas, con un 25%, 22% y 21% respectivamente. En el otro extremo está Galicia con un 10%. Tal y como detallaba ayer Santiago Gil, un 66% de los encuestados estaría dispuesto a utilizar el servicio de los establecimientos de compro oro si bien un 81% sienten desconfianza.
El valor emocional de las joyas
En cuanto a los hábitos y usos, para el 66% de los españoles las joyas tienen un valor sentimental y un 37% las compra por cuestiones estéticas. Otro dato llamativo de la encuesta es que un tercio de los hogares españoles suele dejar las joyas en casa sin caja fuerte durante las vacaciones, un 26% las deja en casa pero resguardadas en una caja fuerte y un 31% suele llevarse las joyas consigo. Solo el 10% deja las joyas en una caja de seguridad privada.
Para Santiago Gil, los datos de este estudio demuestran que “el modelo de empeño no está agotado. Hay un sentimiento de recuperabilidad” y marcó como objetivo de El Monte “trabajar en posicionarnos como alternativa financiera”.
Durante la presentación el director general de la Fundación Montemadrid, José Guirao, destacó la necesidad de “empezar a cambiar la mentalidad para que la sociedad española considere la joya como una inversión muy rentable, no solo por su valor sentimental” y recordó: «Nuestra actividad demuestra que el mundo que gira en torno al oro o las joyas puede tener un lado social, que redunda en el beneficio de la sociedad».