La icónica marca joyera norteamericana acaba de adquirir en subasta en Londres (tras abonar dos millones de dólares más la comisión de remate) un reloj de bolsillo fabricado en oro de 18 quilates por la propia firma a comienzos del pasado siglo XX. Una pieza única que ‘conmemora’ el hundimiento del Titanic.
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La historia del trágico naufragio es bien conocida pero lo que no se sabe tanto es que tres acaudaladas supervivientes de aquella fatídica noche del 15 de abril de 1912 encargaron meses después el reloj a Tiffany para entregarlo como agradecimiento al capitán del Carpathia, el primer buque que llegó tras el naufragio y que consiguió rescatar a cerca de 700 ocupantes del supuestamente insumergible transatlántico.
En su caja, la pieza lleva la inscripción: “Presentado al Capitán Rostron (Arthur H. Rostron) con la sincera gratitud y aprecio de los tres supervivientes del Titanic, el 15 de abril de 1912, la Sra. John B. Thayer, la Sra. John Jacob Astor y la Sra. George D. Widener”. La parte posterior del reloj está grabada con el monograma AHR.
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El reloj es la reliquia de mayor valor subastada hasta la fecha dentro de todos los recuerdos del naufragio y formará parte también de la historia relojera de Tiffany, que se remonta a la primera incursión de la casa de joyería en el mercado de relojes minoristas en 1847.
