A menos un mes de la próxima edición de febrero, ¿Cómo vais a niveles de contratación?
La verdad es que ha muy buenas perspectivas y ya tenemos el pabellón bastante completo. Está siendo una edición un tanto particular porque parecía que las ideas estaban muy claras después de planear una feria muy enfocada a la plata y el Cash & Carry, pero tras la edición de septiembre la sorpresa fue que muchos de los expositores habituales querían participar también en febrero, lo que nos animó a a ampliar el concepto.
Al final será un evento de Madridjoya porque el contenido será el mismo que el de otras ediciones de febrero: Plata, gemas, oro, estuchería, e industrias afines en general. En esta ocasión no estarán serán las firma de relojería y las marcas comerciales, que mantienen su apuesta para septiembre.
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¿En base a lo que te llega desde el Sector, cuáles son tus sensaciones para esta feria?
Estoy segura de que va a ser una buena feria. Lo que nos llega es que la campaña navideña ha sido positiva, aunque las noticias económicas, la incertidumbre general, no ayuda al consumo. Pero es cierto que hay una cosa más importante y es lo que denomino el ‘Estado de ánimo’ que siempre ha caracterizado, negativamente, a la participación de febrero.
Hay que encontrar la fórmula para revertir esa sensación, porque luego el Cash & Carry siempre está lleno, los visitantes tienen buenas perspectivas… pero a veces está tan interiorizado este sentimiento que es difícil cambiarlo. Hay que tener en cuenta que queda prácticamente todo el año por delante, el minorista tiene que reponer, las marcas comerciales lanzarán producto nuevo para primavera y verano… hay muchas oportunidades de venta.
Efectivamente, de hecho, en nuestro entorno las ferias más destacadas se hacen ahora… ¿no es cierto?
Así es, en la mayoría de ferias comerciales de nuestro entorno las ediciones más potentes son las de febrero y esa inercia puede aprovecharla el profesional en Madrid. De hecho, para los mayoristas, fabricantes y proveedores venir a una feria es más económico que realizar un evento propio y más seguro que ir por la calle con un muestrario.
«Queda prácticamente todo el año por delante, el minorista tiene que reponer, las marcas comerciales lanzarán productos nuevos para Primavera y Verano… hay muchas oportunidades de venta en feria»
A pesar de la cierta confusión entre algunos expositores y visitantes con los que hemos hablado, al final, nos encontraremos con el concepto habitual de la edición de febrero… ¿No?
Después de una escucha activa y de una encuesta el resultado fue apabullante, casi el 90% dijo que querían feria en febrero y nuestra obligación es atender a esa demanda. Por eso le pusimos “…Y más” para que nadie se sintiese excluido en esta nueva propuesta. Y como suscitaba algunas dudas, añadimos el nombre de MadridJoya.
El Cash & Carry ocupará aproximadamente un tercio del pabellón 6 porque no tiene lógica es tener dos ubicaciones independientes con una ocupación baja. Eso sí, estará separado por unas cortinas negras que irán desde el techo hasta el suelo, con varios accesos, para crear una diferenciación muy clara.
Al final hay que intentar ser prácticos. El C&C tiene su público y nuestro trabajo es intentar ofrecer la mejor solución porque además, muchas veces el cliente es el mismo para ambos tipos de oferta.
«Bisutex ha recuperado las cifras prepandemia y eso es una excelente noticia. El pabellón estará lleno y han vuelto marcas de nivel, mientras los minis y nuevas propuestas también crecen»
¿Cuál es la situación en el caso de Bisutex?
Afortunadamente Bisutex ya ha recuperado las cifras prepandemia y eso es una excelente noticia. El pabellón está lleno, se han recuperado marcas de nivel, mientras los minis y nuevas propuestas también crecen. De hecho, como hablábamos antes, también aquí hay mucha transversalidad: Hay empresas que últimamente estaban participando en Bisutex y ahora van a apostar por MadridJoya.
En Madridjoya, tras unos años algo más débiles se ha recuperado la afluencia, se han recuperado marcas comerciales, se ha renovado la imagen de la feria… y esos expositores que trabajan con plata y gemas prefieren estar de nuevo en la feria de joyería porque el perfil del comprador es más acorde con su producto.
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¿También seguís apostando por vuestro Programa de compradores?
Sin duda. Mantenemos un amplio programa de compradores internacionales que además resulta de mucha utilidad para la pequeña y mediana empresa, que en muchas ocasiones no tiene la capacidad de salir al exterior. Esta es una forma excelente de establecer primeros contactos con mayoristas y distribuidores que vienen de Europa, América u otros puntos del mundo para dar ese paso internacional.
¿Qué actividades paralelas tenéis previstas en la feria?
Contaremos con actividades propias y de entidades colaboradoras pero es verdad que reservamos el grueso de las propuestas para septiembre pues la idea en esta feria es que tenga un peso más comercial, más práctico, para hacer pedidos y reponer stock de cara a primavera y verano.
No obstante el Foro Imagen y sus charlas estarán dentro del pabellón 6, y además habrán propuestas de diseño más artísticas como el Proyecto Wabi Sabi, con piezas de joyería y artísticas elaboradas con materiales reutilizados impulsada por Raquel Lobelos; también tendremos trabajos de alumnos del Centro Superior de Diseño de Moda de Madrid; o una muestra de Orfebrería de la asociación Adhoc.