El calentamiento global y sus efectos en los océanos van a suponer en los próximos años un desafío masivo para la industria de las perlas. “Los eventos extremos en el mar, que anteriormente pasaban una vez cada 100 años, ocurrirán todos los años a fines de este siglo”, escribe Pierre Fallourd, colaborador del Informe Especial que CIBJO acaba de publicar a una semana de su Congreso.
El documento proporciona una visión general amplia de una industria que ha estado lidiando con los desafíos duales de COVID-19 y el cambio climático durante los últimos dos años, con perspectivas de Australia, Indonesia, la Polinesia Francesa, México, Bahrein y los Emiratos Árabes.
“La acidificación de los océanos, los cambios en las corrientes marinas y los flujos de nutrientes, así como los fenómenos meteorológicos extremos, desafían directamente la productividad del crecimiento del nácar, lo que da como resultado perlas más pequeñas y un tiempo de cultivo más prolongado”, advierte el analista.
En este enlace se puede estudiar el amplio informe que detalla la situación en algunas de las grandes zonas productoras:
http://www.cibjo.org/congress2021/wp-content/uploads/2021/10/CIBJO-Special-Report-2021-Pearls.pdf