El motor económico chino está gripado y eso se ha notado en la última feria de Joyería y Gemas de Hong Kong, tal y como nos traslada en una conversación telefónica el empresario y presidente de Facet, José Miguel Serret, que estuvo presente en la feria asiática y nos traslada de primera mano sus impresiones.
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“Los pabellones de las marcas de alta joyería y gemas antes repletos estuvieron prácticamente vacíos durante toda la feria y sólo faltaban esas plantas rodantes del desierto que tenemos en las imágenes icónicas de los westerns”, nos explica el empresario.
Una potente metáfora visual y es que China, con sus más de 1.400 millones de habitantes, está ahora sufriendo en carne propia la resaca de un crecimiento meteórico con ‘burbujas’ como la inmobiliaria, —tras el colapso del gigante promotor Evergrande, por ejemplo— que en algún momento y por la propia dinámica de la Economía, acaban explotando.
“Hay unos factores de rareza, de exclusividad y, sobre todo de emoción, que la industria debe impulsar para trasladárselo al cliente final si queremos recuperar ese mercado”
Eso lo saben también los que han practicado submarinismo alguna vez: Si uno sube del fondo demasiado rápido, las burbujas de nitrógeno acumuladas en la sangre no traen nada bueno…
Por supuesto todo es cíclico afortunadamente y volverán mejores tiempos. En este sentido el responsable de Facet es “optimista” pero también apunta a ciertos factores que son “imprescindibles de recuperar” para que la alta joyería vuelva a presentarse ante el cliente en todo su valor:
La cadena de suministro del diamante está sufriendo, desde las mineras a los talladores y los detallistas” afirma Serret. Cierto que es un bien de mercado sometido a la ley de la oferta y la demanda pero es mucho más que eso: “Hay unos factores de rareza, de exclusividad y, sobre todo de emoción, que la industria debe impulsar para trasladárselo al cliente final si queremos recuperar ese mercado”.
Breve instantánea
Según las últimas noticias que nos llegan desde Rapaport la venta de diamantes en la feria de Hong Kong efectivamente cumplió con esas bajas expectativas. India reduce sus inventarios de diamantes en bruto, mientras las importaciones netas en bruto se redujeron un 53%. «Se espera una reducción de oferta de diamantes pulidos» apuntan telegráficamente desde este conocido medio internacional.
Por su parte De Beers canceló las ventas de agosto y mantiene precios. Mientras que Okavango (la empresa pública del Gobierno de Botswana), ha cancelado ya sus ventas de bruto de noviembre y diciembre.
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La Trazabilidad: una ventaja competitiva
A la espera de mejores tiempos los grandes operadores de diamantes junto a las marcas más importantes están trabajando en la trazabilidad de sus joyas. Lo definen como una “ventaja distintiva en estos momentos de incertidumbre”, pues los nuevos y futuros consumidores, como Millennials y Generación Z, priorizan el lujo sostenible.
Este tema está en la mesa de todos los consejos de administración de las marcas, nadie quiere quedarse atrás»
“Esa es nuestra tarea y en ello vamos a seguir trabajando, igual que seguimos apostando todo por la trazabilidad y la mayor transparencia en nuestra industria” añade Serret, que como hemos publicado en DIARIOJOYA es una de las noticias más positivas, pues la firma española Tracemark sigue abriéndose paso en el ‘top’ de la industria internacional como un referente en el seguimiento de las joyas y las gemas desde la mina hasta el mostrador.
Situación complicada, pero el business continua
Muchas de las grandes marcas de alta joyería están arriando velas en Asia por el momento. Hace poco leíamos en medios internacionales que la icónica Tiffany’s ponía en alquiler la mitad de su megatienda de más de 12.000 metros cuadrados en Shangai, por poner sólo un ejemplo destacado.
Otras marcas de joyería en gama media, o compradores mayoristas españoles que han acudido a la feria de Hong Kong también han visto este encuentro de una forma más positiva puesto que el mercado allí es inmenso y siempre hay oportunidades de negocio, tanto allí, como aquí.
También algunos proveedores de maquinaria y equipamiento, colaboradores de conocidas empresas españolas nos han trasladado su “satisfacción moderada” a pesar de que no han sido sus mejores ferias.
En todo caso y como decíamos antes estamos sin duda en un momento de inflexión y de ‘reset’ para este sector, y aun cuando otros factores ajenos a la industria joyera poco ayudan para trasladar tranquilidad y confianza a los consumidores. Pero es el momento de seguir adelante pues el que no avanza, retrocede.
