Por segunda vez nos trasladamos a nuestra península (tras las variscitas de Abraham Vázquez) con la también diseñadora catalana Pilar Aymerich, que ha ‘retratado’ en su interpretación para el Proyecto Denisova una de las figuras más relevantes de la cultura ibera: La Dama de Elche.
La pieza fue hallada casualmente en 1897 en Elche, Alicante, y posteriormente fue adquirida por el Museo del Louvre. En 1941, fruto de un intercambio de arte entre España y Francia, regresó junto con otras obras y se depositó en el Museo del Prado. En 1971 pasó a los fondos del Museo Arqueológico Nacional, en Madrid, donde permanece expuesta.
ENTREVISTA
¿Por qué elegiste esta pieza?
Porque es la representación más importante de la cultura íbera y de la civilización que da nombre a nuestra península. Aparte, es una imagen que siempre me ha cautivado por su perfección y belleza.
¿Cómo planteaste la interpretación de la pieza?
Al ser los íberos un pueblo básicamente mediterráneo, me inspiró el color azul del mar, y a continuación pensé en sus trabajos de alfarería y vino la representación de las ánforas porta-amuletos en cerámica y la frescura de los tonos azules.
¿Que buscas transmitir con tu trabajo?
Pienso que la joyería no debe de encasillarse en oro o plata, sino en metales y materiales alternativos muy acordes con la época actual. Para mi es muy importante la creatividad y el diseño, y el concepto de joya no ha de ir ligado a su precio sino a su calidad y vanguardismo.
¿Por qué es importante este Proyecto?
Al haber estudiado Bellas Artes, Pintura y Diseño Gráfico, soy una amante de la Historia del Arte. Pensar en que 50.000 años atrás existía una civilización que recorría 100 kilómetros para ir a buscar minerales me apasionó y no pude resistirme a participar en este gran proyecto.
¿Cuánto de ti, y cuanto de la pieza original, hay en la creación que has presentado al Proyecto?
Soy una amante de los collares grandes y extremados, y en la Dama de Elche vi reflejado mi estilo y exuberancia. Expresar lo que una civilización como fue la ibérica, quería representar a través de sus joyas me llevó a estudiar e indagar el porqué de sus complementos altamente vistosos y exagerados.
«El cliente español cada vez valora y desea más la joya de autor pero aún le cuesta un poco asumir los costes que esto representa»
¿Se ha alejado mucho el trabajo para Denisova del tipo de joyería que realizas habitualmente?
Era un reto muy importante y quería seguir fiel a mi estilo pero jugar con unos materiales diferentes que recordaran el mundo íbero. Incorporar la cerámica fue un material que nunca había utilizado y le ha dado a mi creación un toque de frescura y color mediterráneo. Ha sido toda una experiencia.
¿Has percibido un mayor acercamiento en los últimos tiempos a la joyería de autor por parte del público final?
El cliente español cada vez valora y desea más la joya de autor pero aún le cuesta un poco asumir los costes que esto representa. Particularmente he notado más acercamiento y valoración de mis creaciones.
SOBRE LA AUTORA
Pilar Aymerich es una diseñadora cuya vida ha tenido siempre un estrecho vínculo con el mundo de la joyería. Hija de padres joyeros, su formación dio comienzo en la emblemática Escuela Massana de Barcelona durante siete años, donde se especializa en Artes plásticas y diseño.
Fascinada por la cultura asiática, viajó por Tailandia y Bali durante doce años, aprendiendo de su buen hacer, su respeto y delicadeza. Poco a poco fue participando en ferias del sector del lujo como la “Fira del luxe” en el Castillo de Peralada, la “Luxury fair” en Barcelona, y la “Fira del luxe” en S’Agaró.
«Todas y cada una de mis creaciones son únicas e irrepetibles» expresa Aymerich. Su conexión con las piedras preciosas y los minerales va más allá de la simple relación entre el artista y su obra, dotando de personalidad propia a cada una de sus joyas. Básicamente, sus creaciones son con piedras sin pulir mezcladas con otros minerales pulidos y bronce artesanal, dándoles el nombre de “Glamour salvaje”.
Para saber más de Pilar