La X Asamblea Anual de la Asociación Nacional de Relojeros Reparadores (ANPRE) celebrada en Sevilla del 27 al 29 de octubre puso el broche final a un fin de semana dedicado a la formación y a las novedades en materia de relojería que paralelamente se presentaron en otro hotel de la capital andaluza, en un evento organizado por Comercial Kirman.
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La entidad presidida por Manuel Díaz Muñoz reunió a más de una veintena de asociados que atendieron al curso magistral impartido por el experto suizo Auberson Cédric y en el que actuó como traductor el maestro relojero Juan Moragas, creador de los famosos relojes españoles Artauro.
Cédric realizó un laboratorio experimental en los que abordó las causas y soluciones que se dan para obtener un reglaje correcto. Los asociados se agruparon en equipos para llevar a cabo diferentes acciones sobre los movimientos, de forma física, para posteriormente encontrar las mejores soluciones de reparación y explicarlas al resto de sus colegas.
“Hemos visto que es importante la interacción entre nuestros socios y el cambio de impresiones sobre el trabajo realizado, se volverá a hacer con otros movimientos” nos explica el nuevo director de comunicación de ANPRE, Miguel Ángel Rodríguez.
Retos pendientes
Dentro de las conclusiones de la asamblea que se llevó a cabo el domingo 29 destaca la programación de las visitas en 2024 a centros de producción en Suiza y también al taller en Córdoba del relojero Juan Moragas, que sigue trabajando en nuevos proyectos.
También se volvió a poner de manifiesto uno de los principales caballos de batalla del sector, que es lograr repuestos de las casas relojeras. Unas limitaciones que además “van en aumento” como nos transmitía el presidente de ANPRE pues marcas medias, antaño más accesibles, están ahora endureciendo las condiciones para surtir a los profesionales.
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La Asamblea destacó también el avance en la acreditación profesional de Reparador de Relojes que se tramita a través del Centro de Referencia Nacional de Joyería y el Instituto Nacional de las Cualificaciones (INCUAL), aunque la actual incertidumbre política mantiene el proceso en stand by.
Entre las novedades planteadas destaca también la propuesta para establecer unos Certificados de Autenticidad a ciertos relojes de alta gama que llegan a manos de los reparadores. Tal y como nos explica Miguel Ángel Rodríguez, “se trata de un proyecto aún por detallar pero la Asociación está trabajando a varios niveles, incluidos los legales, para que se pueda establecer un protocolo que ofrezca más seguridad al cliente final.
