El laboratorio del Instituto Gemológico de América en Carlsbad, California, acaba de analizar recientemente un diamante verde que se presuponía irradiado debido a la rareza de los diamantes verdes de color natural. “Su escasez ha creado una importante demanda de diamantes verdes irradiados artificialmente” explica Michaela Stephan, gemóloga de la GIA y responsable del análisis.
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La piedra en cuestión era un diamante verde en talla brillante de de 2,42 quilates cuyo color había sido alterado con el uso de sales radiactivas. Un método de alteración del color en desuso debido a que el tratamiento con sales radiactivas (con Radio) puede producir resultados peligrosamente radiactivos.

Hoy en día, la mayoría de los diamantes irradiados artificialmente se tratan con un haz de electrones de baja energía aunque este caso el contador Geiger mostró una radioactividad muy débil en la gema.
El análisis microscópico reveló manchas de radiación poco profundas y moteadas verdes sobre grandes áreas de la piedra, lo que causaba su color verde en el cuerpo (figura 2). Estas manchas de radiación se produjeron al exponer el diamante, tras ser cortado y pulido a sales radiactivas durante un período prolongado.

Las manchas inertes a la radiación de luz ultravioleta eran fácilmente visibles contra la fluorescencia azul del diamante vista en el DiamondView, tal y como se aprecia en la imagen superior.
Más información en www.gia.edu