Según acabamos de conocer por medios internacionales del sector, el productor de diamantes de laboratorio Washington Lab Grow Diamonds (WD), acaba de acogerse a un concurso de acreedores para hacer frente a sus compromisos por los malos resultados obtenidos en los últimos ejercicios fiscales.
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Se trata de la segunda empresa productora del país, detrás de la conocida Diamond Foundry (por ser accionista el actor Leonardo Di Caprio), y que se ha visto obligada a presentar la solicitud ante las autoridades fiscales por no poder hacer frente a sus acreedores al contar con una deuda cercana a los 45 millones de dólares y un activo que no supera los 3 millones.
Eso no significa que desaparezca esta empresa creada en 2008 pues, tal y como aseguraban en una nota, a finales de esta misma semana presentarán sus “planes de futuro”.
Según publican algunos medios especializados “la caída de los precios debido a la actual situación del mercado y a la fuerte competencia de los mercados de China e India en la producción de diamantes de laboratorio habrían reducido al límite el margen de beneficio de la empresa”.
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