La conocida red de comercio de diamantes con listados diarios de 1,8 millones de piedras valoradas en 8.700 millones de dólares, acaba de anunciar que cierra el grifo a la venta de diamantes procedentes de Rusia adquiridos después del 24 de febrero.
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La prohibición incluye a los diamantes pulidos producidos fuera de Rusia a partir del bruto procedente del país, un hecho que ya adelanta una “probable escasez antes de la temporada navideña”, tal y como advierte Martin Rapaport en un comunicado. Y la consecuente subida de precios.
“Las sanciones a Rusia están cambiando fundamentalmente la cadena de suministro de diamantes. Los compradores quieren garantías sobre el origen de sus diamantes ya que las consideraciones éticas trascienden los requisitos legales” añade Rapaport.